jueves, 14 de junio de 2018

BALONCESTO JUVENIL MASCULINO (ÚLTIMA CRÓNICA TEMP. 2017/2018)

Última crónica de la temporada, hora de recapacitar y reflexionar sobre ella.

Llega Septiembre y con ello la llamada oportuna de Félix, a quién le doy las gracias un año más, diciéndome que no tenía equipo, que solo se habían apuntado tres de los jugadores del año pasado, aunque yo tenía claro que prácticamente todos, seguirían, así me lo hicieron saber al acabar la temporada anterior. Y así fue, el día de la reunión con padres y jugadores allí estuvieron para organizarnos y planificar, once jugadores, de los cuales únicamente no conocía a uno, y otros dos que no pudieron asistir pero que los tenía muy presentes.
Desde el minuto uno, todos nos hemos adaptado a este equipo, ha habido durante todo el año circunstancias que se plantearon al equipo entero y que sin ningún problema se acataron (vosotros ya sabéis de qué hablo) y eso ya es primer motivo para daros las gracias, por entender las diferentes situaciones y aun así seguir remando juntos.


Según pasaban los entrenamientos y los iba conociendo más, tenía muy claro que este equipo lo iba a dar todo, que el esfuerzo no se negociaba y no me equivoqué, me lo han demostrado día tras día. Han triunfado precisamente por eso, por ser un equipo, por ir todos a la par, por estar en esto juntos y es posiblemente, dejando el baloncesto un poco de lado, lo que más orgullosa me haga sentir, la calidad humana que tienen estos trece jugadores, todos y cada uno de ellos.


Saber levantarse y tirar de un grupo cuando las cosas no van como esperabas es algo muy complicado y que no todo el mundo sabe hacer, pero vosotros tenéis la gran virtud de poder tirar de vosotros mismos, de los que tenéis alrededor y de quién haga falta para conseguir vuestros objetivos. Hubo momentos, y quién dice momentos dice derrotas, que no fueron esperadas pero lo que ya he dicho, vuestro esfuerzo no se puede discutir, y ahí más que nunca supisteis que yendo todos a una conseguiríais llegar a ser campeones de la liga y de la primera copa, y ha sido más que merecido.

La constancia y la confianza en vuestros compañeros y en vosotros mismos os ha hecho brillar, y os hará brillar, ya sabéis que esto no acaba aquí, y por supuesto, una vez, daros las gracias también por confiar en mí y en mi forma de ver y jugar a este deporte, porque creo firmemente en lo que hago gracias a vosotros, he creído y creo en vosotros.

Hemos cerrado una etapa juntos, la gran mayoría de vosotros ya pasáis a la vida universitaria y por tanto dejáis atrás el instituto, y con ello este EQUIPO, lo habéis dejado en lo más alto, no puedo reprocharos nada. Daros la enhorabuena por todo lo conseguido y por todo lo que aún os queda, sois increíbles, en todos los aspectos, sin vuestro trabajo y sacrificio nada de esto hubiera sido posible. Es muy gratificante para un entrenador, al fin y al cabo, un educador, ver que su trabajo obtiene recompensa por tener un grupo excelente de personas con las que poder ejecutarlos, así que por esto y por más, una vez más, gracias.

El éxito es cuando consigues llegar al máximo nivel posible, cuando vuelves a casa después de un partido o de un entrenamiento y te dices "lo he dado todo". Eso es el éxito. Cuando consigues que tu equipo llegue a un nivel de autoexigencia y de autodisciplina que no necesita alguien que les empuje. El sentido de la responsabilidad como grupo es lo que marca la madurez de un equipo, su capacidad para pelear por los objetivos. Hemos tenido éxito por todo esto, por vosotros.

No tengo palabras para agradeceros todo esto, y las palabras se las lleva el viento, me lo habéis demostrado durante todo este tiempo, algunos tres años, otros dos y alguno uno, me habéis hecho crecer y mejorar, dentro y fuera. Creo que ya lo dije todo el último día cuando me tocó "despedirme" de vosotros, porque sinceramente, espero que no fuera una despedida, espero poder seguir disfrutando al veros en una pista, así que simplemente GRACIAS Sergio, Pablo, Samu, Juan Pardo, Luis, Juan, Javi, Raúl, Guille, Héctor, Daniel, Asier y Carlos.

Un año más, seguid soñando y... GRACIAS POR HACERME SOÑAR.

Sara Marcos
Entrenadora del Equipo Juvenil Masculino 2017/2018


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